Un grave desprecio a Sanabria, otro más a la Región Leonesa

Hace unos días RENFE anunciaba que suprimirá 2 de las 8 frecuencias de AVE que actualmente tiene la comarca zamorana de Sanabria, lo que obviamente ha causado malestar y ha levantado a los vecinos de la zona, para quienes en algunos casos la eliminación de parada del conocido como ‘tren madrugador’ supone que ya no podrán ir en tren a su puesto de trabajo, por lo que o encuentran una alternativa de transporte que les permita ir y llegar en tiempo y forma o tendrán que abandonar su residencia en Sanabria.

Un duro golpe para Sanabria y la provincia de Zamora que se deriva de la petición realizada por el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, que pidió la supresión de paradas en Sanabria para ganar minutos en el trayecto Vigo-Madrid. Es decir, planteaba poco menos que los trenes pasen de largo por Sanabria porque le estorba y molesta que el AVE emplee unos minutos en parar a recoger pasajeros en esta comarca del oeste zamorano.

Por su parte, el ministro del ramo, Óscar Puente, tan sensible siempre a las cosas de la Región Leonesa, se mofaba sarcásticamente en redes sociales de que en la provincia de Zamora anduviesen “soliviantados porque Renfe suprime 2 de las 8 frecuencias/día de AVE en Sanabria”. Como si quitar el 25% de las frecuencias de tren a un territorio no fuese perjudicial y lesivo para una comarca como Sanabria, que ya de por sí está sufriendo la despoblación, hecho que la supresión de servicios no puede sino agravar.

Ahora bien, lo de Óscar Puente ya viene de largo cuando se trata de la Región Leonesa. Hemos venido sufriendo los constantes desprecios que ha proferido desde su ministerio a la provincia de Salamanca en materia ferroviaria o con el mal estado de las autovías A-66 y A-62. Desprecios que también han sufrido en Zamora y León respecto a la construcción de las autovías A-11 y A-60, apuntando sobre la primera que su prioridad era construir el tramo Valladolid-Soria, considerando no prioritario el Zamora-Portugal, aun y cuando la N-122 en este tramo reviste la mayor siniestralidad de Zamora. Y otro tanto con la A-60, para la que dijo que impulsaría la construcción de la autovía en los tramos de la provincia de Valladolid, pero que en la provincia de León se olviden de que construya sus tramos de esta autovía, que ahí si acaso convertiría la nacional en una vía 2+1.

Y qué decir de la Ruta de la Plata, para cuya recuperación se lleva años pidiendo adelantar el plazo límite de su recuperación y el ministro Puente, sin embargo, sigue empeñado en que este plazo límite siga en 2050, dilatando además al máximo los plazos para el estudio de viabilidad previo, como si le molestase que esta infraestructura volviese a vertebrar por tren la Región Leonesa y el Oeste de España. Como si le molestase el desarrollo de provincias como Salamanca, Zamora, León o Cáceres.

Por ello, no extraña la postura insolidaria y falta de visión de Estado del ministro Óscar Puente, o la del presidente de RENFE, Álvaro Fernández Heredia, quien por cierto fue gerente de AUVASA (Autobuses Urbanos de Valladolid) cuando Óscar Puente fue alcalde de Valladolid, llevándoselo en marzo de 2024 a su ministerio como Secretario general de Movilidad Sostenible, para posteriormente nombrarlo presidente de RENFE en enero de 2025.

Y es que si la lógica aconsejaría mantener los servicios y frecuencias de alta velocidad en Sanabria, y no meterles un tijeretazo del 25% de sus frecuencias para dificultar la lucha contra la despoblación que está sufriendo, parece difícil que la lógica se imponga cuando a los dirigentes de RENFE y el Ministerio les parece mover más la inquina y el odio hacia el desarrollo de la Región Leonesa, aprovechándose en este caso del egoísmo del alcalde de Vigo, que ha demostrado una nula empatía hacia Sanabria, evidenciando que más allá de su afamado alumbrado navideño, le faltan bastantes luces.