La Catedral de Salamanca está "muy viva": 495 eucaristías y 5.000 peregrinos en el último año

La Catedral de Salamanca no es solo un monumento imponente que define el horizonte de la ciudad; es un organismo vivo, un corazón que late con fuerza al ritmo de una actividad incesante y diversa. Esta vitalidad ha quedado plasmada en la Memoria de Actividades 2024, un documento presentado este martes por el deán del Cabildo Catedral, Jorge García, y el gerente de la seo, Raúl Vicente.

"Todavía habrá que esperar para la inauguración de la ampliación de la exposición de Ieronimus, pero será este año", anticipaba.

El pulso diario de una Catedral "Muy Viva"

"Estamos muy contentos cuando hacemos el compendio total de toda la variedad de actividades porque nos damos cuenta de lo viva que está la catedral, de la actividad que tiene", confesó el gerente. Esta sensación de vitalidad es compartida por el Cabildo, que ve con satisfacción cómo el templo se convierte en un foco de constante quehacer.

La valoración global es inequívocamente positiva: "porque es una catedral una catedral muy viva". La memoria detalla que "prácticamente, todos los días hay actividades". Este flujo constante es lo que configura el carácter dinámico del templo, convirtiéndolo en un referente no solo espiritual, sino también cultural y social para Salamanca y sus visitantes.

Cifras que hablan

Más allá de las percepciones, la Memoria de Actividades 2024 ofrece datos concretos que cuantifican el alcance de esta labor. Estas cifras, presentadas de manera sucinta, revelan la profundidad del impacto de la Catedral en diversas áreas.

En el ámbito estrictamente pastoral y litúrgico, los números son elocuentes. Se registraron 495 celebraciones de la Eucaristía, un pilar fundamental de la vida de fe de la comunidad. A ello se suma la acogida de 120 grupos de peregrinos, que congregaron a más de 5.000 personas procedentes de más de 23 países distintos.

Estos peregrinos no solo visitaron el templo, sino que también participaron activamente en celebraciones eucarísticas, subrayando el papel de la Catedral como destino espiritual de alcance internacional. Además, la seo fue el escenario de 73 celebraciones de matrimonio, momentos de gozo y compromiso que vinculan a la comunidad con su iglesia.

El compromiso con la educación y la divulgación cultural también ocupa un lugar destacado. La Catedral recibió más de 200 visitas escolares, lo que se traduce en la participación de casi 205 aulas. Estos jóvenes estudiantes tuvieron la oportunidad de conocer de primera mano el rico patrimonio histórico, artístico y espiritual que alberga el templo, una labor pedagógica de incalculable valor. Este esfuerzo se enmarca dentro del programa de la Fundación Catedral, que busca acercar este legado a las nuevas generaciones.

La investigación y la preservación del patrimonio son otras de las facetas cruciales de la actividad catedralicia. En este sentido, la memoria destaca la incorporación de más de 30.000 nuevas imágenes digitales que se han puesto al servicio de los investigadores. Esta ingente tarea de digitalización no solo garantiza la conservación de documentos y obras de arte para el futuro, sino que también facilita el acceso al conocimiento, promoviendo estudios y análisis que enriquecen la comprensión de la historia y el arte vinculados a la Catedral.

El esfuerzo de muchas personas

La Memoria de Actividades 2024 no es, por tanto, un simple listado de eventos, sino una ventana abierta a la compleja y rica realidad de la Catedral de Salamanca. Refleja el esfuerzo de muchas personas –desde el Cabildo y los empleados hasta los voluntarios y colaboradores– que día a día contribuyen a que este emblemático espacio siga siendo un faro de fe, un centro de cultura y un punto de encuentro para la comunidad local y los visitantes de todo el mundo.

La diversidad de sus actividades, desde la solemnidad de la liturgia hasta el bullicio de las visitas escolares o el silencio concentrado de los investigadores, compone un mosaico vibrante que define a la Catedral de Salamanca en el siglo XXI: un legado histórico que mira con decisión y esperanza hacia el futuro.

Fotos de Ángel Puma