Homenaje a Carmen Martín Gaite y exposición de la escultora Amelia García en la sede de UGT Salamanca

Pareciera que nuestros “jubilados” no cejan en su empeño de aprender y de tener iniciativas, de disfrutar en comunidad del aprendizaje y del homenaje. Homenaje a los afiliados de UGT con más de cuarenta años de antigüedad, que no es poco, y aprendizaje para escuchar a ponentes de probada solvencia que acuden a la Casa del Pueblo ante un público interesado y atento.

Dos días de mayo para disfrutar también de espacio de encuentro y compromiso. El martes, el doctor Rolando Salazar Aliága dio una charla sobre los mayores en Salamanca, a la que le siguió otra en la que Joaquín Merchán Bermejo, presidente de la Asociación Española de Graduados Sociales habló, tras la presentación de Luis Sánchez Tercero, acerca del sistema público de pensiones y servicios sociales. Temas evidentemente, de sumo interés para los oyentes que tuvieron el miércoles el gusto de escuchar a la doctora María Fernanda Lorenzo Gómez, jefa del servicio de Urología del Hospital Clínico de Salamanca y profesora de la USAL, quien con un lenguaje sumamente claro y sentido, habló de los problemas urológicos generalmente asociados a la edad, y lo hizo como uno espera que lo haga un médico: con cercanía, sabiduría y claridad. El turno de preguntas atestiguó que el tema era muy interesante para un auditorio que tuvo que cambiar de registro… porque las charlas se cerraron con una visión a vuela pluma de la vida y la obra de Carmen Martín Gaite, centrándose en su aspecto social, en el compromiso con una vida de trabajo intenso y continuado y bajo la influencia de un padre trabajador y liberal. Ambas conferencias fueron presentadas y moderadas por María García Gómez, invitándose después al público a asistir a la apertura de la exposición de las piezas escultóricas de Amelia García.

La artista de Valverdón, que acaba de exponer en Peñaranda, trae de nuevo ante el público sus ya conocidas cabezas y cuerpos de mujer en ese ejercicio de sororidad que se centra en la belleza y su particular lenguaje artístico. Pero Amelia García aporta algo más, el fruto de su trabajo en el pasado verano de su taller junto al río: cuadros de papel, papel japonés, que juegan con el relieve sobre el lienzo, tratado con colas, cretas, caolines y acrílicos.

Uno de los cuadros muestra sus ya clásicas mujeres unidas en un ejercicio de sororidad, y otro, titulado “Asalariados”, en el que aparecen figuras humanas y ese niño que simboliza el trabajo infantil de los países que no prohíben esa lacra, sorprende por su temática. Estamos en la casa del pueblo y la lectura tiene que ser social, como su ya conocido cuadro que homenajea a las 13 rosas, realizado con restos vegetales que recoge en sus paseos por su pueblo de Valverdón y flores de porcelana bellamente talladas por la escultora sobre un fondo violeta que significa el feminismo. Un cuadro de una enorme belleza al que acompañan piezas más pequeñas donde también trabaja la flor de porcelana sobre fondos muy trabajados y sugerentes que nos recuerdan su enorme capacidad para ir más allá y seguir leyendo el mundo que nos toca vivir a través de su arte y de su exquisito oficio. Un broche de oro para unas jornadas muy especiales dedicadas a quienes no se cansan de seguir aprendiendo y ejerciendo el compromiso que les hermana.